Sostener una práctica de yoga, en sus diferentes formas, conduce a incorporar naturalmente herramientas que aportan bienestar a largo plazo.
Conectarse conscientemente con la respiración, nos coloca constantemente en el momento presente, para así bajar nuestro nivel de ansiedad, estrés o preocupación. Las posturas otorgan elongación, fuerza y equilibrio. La capacidad de relajarse nos facilita la posibilidad de soltar. Desarrollar la concentración a través de la meditación, constituye un pilar en nuestra sensación de calma y conexión personal. |